La brecha de seguridad ocurrió en marzo de 2018 y el gigante de Internet decidió no comunicar que dicho fallo existía
Un total de 438 aplicaciones usaron la interfaz de programación que permitía acceder a los datos privados de los usuarios
Alphabetm, la matriz de Google, ha decidido este lunes cerrar Google+, su red social, después de que los datos personales de 500.000 usuarios quedaran expuestos al ser afectados por un error de programación, según ha informado la compañía en un comunicado.
La brecha de seguridad fue detectada en marzo de 2018, estuvo activa desde 2015 y, según ha publicado el diario ‘The Wall Street Journal’, el gigante de Internet decidió no comunicar que dicho fallo existía. El informe interno al que ha tenido acceso el diario estadounidense indica que el equipo legal de Google recomendó no comunicar el fallo de seguridad para evitar el “interés regulatorio inmediato”, comparando las posibles consecuencias con el escrutinio sobre Facebook después de descubrirse la brecha de seguridad que usó Cambridge Analytica.
Un total de 438 aplicaciones usaron la interfaz de programación que permitía acceder a los datos privados de los usuarios. No obstante, Alphabet ha subrayado que no ha encontrado pruebas de que los desarrolladores fueran conscientes de que existía esta brecha de seguridad o de que haya hecho uso de esos datos.
Google también afirma que los desarrolladores de aplicaciones desconocían el fallo y, por lo tanto, no utilizaron los datos expuestos: “No hemos encontrado evidencia de que los datos se usaran de manera inadecuada”.
Google+ cuenta con millones de usuarios y es utilizado principalmente por profesionales que están interesados en temas específicos y pueden ver las actualizaciones de sus contactos a través de los “círculos”.
Los círculos son grupos de contactos creados por el usuario de acuerdo con los criterios de su elección: intereses, categorías de clientes, relaciones, etc., y dentro de los cuales es posible decidir el contenido que se compartirá.
Las acciones de Alphabet han descendido un 1,36% tras conocerse el fallo de seguridad hasta un precio de 1.151,83 dólares, frente a los 1.167,83 dólares en los que cerró el viernes.
Fuente: El Mundo